Preparando la transmisión de mi farmacia. Cargas y gravámenes sobre los bienes a transmitir.

Es frecuente que quien tiene un préstamo bancario, por ejemplo, para la adquisición de una vivienda, un local, o la propia farmacia, en lugar de decir que tiene un préstamo, se exprese diciendo que «tiene una hipoteca», o que está pagando, o ha pagado ya «esa hipoteca».

Confusión entre hipoteca y préstamo

Recordemos, una vez más, que las hipotecas no se pagan, lo que se paga es el préstamo, con sus cuotas de principal e intereses.

La confusión de términos explica la frecuencia con que, bien los vendedores, bien compradores que van a echar mano de inmuebles propios o de familiares en la financiación de su compra, descubren que no pueden disponer plenamente de tales bienes, puesto que están gravados con su correspondiente hipoteca.

Y sí, el préstamo puede estar pagado y cancelado, incluso hace años, pero la carga, esa garantía sobre el préstamo que es la hipoteca, aún está inscrita, con vida, en el correspondiente registro.

Cancelación de cargas y gravámenes

Los pasos y cuestiones que hemos de tener en cuenta para la cancelación de la carga serían los siguientes:

  • Conseguir el certificado de cancelación económica que acredite que el préstamo ya se abonó.
  • En ocasiones, podría darse el caso que lo tenga que expedir un banco del que ya no somos clientes, o incluso un banco que ya no existe.
  • Un apoderado del banco tendrá que acudir a la notaría para que se levante acta acordando la cancelación de la hipoteca.
  • El acta notarial anterior, ha de ser llevada posteriormente al registro para que se anote la cancelación, de forma que el bien quede totalmente libre de cargas y pueda disponerse de él.

Preparémonos con antelación suficiente

Estos trámites nos costarán algún dinero, pero, sobre todo, demasiado tiempo si nos enfrentamos a él en la última fase de la transmisión de la farmacia, a pocos días de la fecha prevista para la escritura.

Revisemos este extremo detenidamente y, si es preciso, iniciemos los trámites de cancelación cuanto antes. Atendido con perspectiva, es un asunto generalmente sencillo, pero en el último momento nos puede complicar la transmisión.

En definitiva, que no le sorprenda que un banco les haga esta solicitud, y no le den más importancia, es razonable, y se trata de una colaboración mínima, meramente instrumental.