Estoy mirando farmacias por la zona norte y tengo algunas dudas respecto al modelo navarro y por ende a las farmacias de Navarra que están en venta en FCT.¿Todas las farmacias tanto las de nueva apertura con la nueva ley foral y las anteriores estan concertadas con el sistema navarro de salud, esto es, todas recogen recetas? Si se puede actualmente aperturar una oficina libremente con tan solo solicitar la autorización, el precio de las farmacias a la venta tendrá un coste indudablemente menor que en otras zonas, sobre todo habrán caido mucho el precio de las zonas rurales, entonces y hay les pregunto ¿qué valor estimativo se suelen vender las farmacias navarras? ¿por cuantas veces encima del valor de la facturación anual? he llegado a ver como pedían hasta más 3 veces el precio de la facturacion anual en comunidades del entorno.
En la actualidad, todas las oficinas de farmacia de Navarra, salvo que sus titulares lo rechazaran expresamente, están adscritas al convenio con el Gobierno de Navarra.
Aunque, efectivamente, el coste inicial de abrir una oficina de farmacia es presumiblemente menor, tenga también en cuenta que su facturación parte de cero y, por lo tanto, quizá sea más interesante la operación de compra de una farmacia que esté en funcionamiento y con un fondo de comercio consolidado.
Respecto al precio de las oficinas de farmacia, Farmaconsulting descarta radicalmente la referencia a coeficientes multiplicadores de la facturación. ¿es igual una farmacia que tenga unos empleados con treinta años de antigüedad, o un alquiler carísimo, que una que, facturando lo mismo, tenga una plantilla recién contratada y local cedido por un Ayuntamiento? entonces ¿Cómo podemos multiplicar por un coeficiente objetivo la cifra de ventas anuales, sin tener en cuenta la concreta rentabilidad de cada explotación?
Para calcular el precio de una operación, (en una exposición muy resumida, Farmaconsulting propone analizar la explotación atendiendo a los últimos cinco año; posteriormente, calcular la rentabilidad objetiva actual y, finalmente, con esa rentabilidad, suponer cuántos años estaría dispuesto un comprador a esperar para recuperar su inversión. El resultado de esa multiplicación de años por rentabilidad sería el precio.